Galicia vive otra noche de los mil rayos

Galicia vivió ayer la jornada entre miles de rayos. Más de 1.100 tocaron tierra en la comunidad y casi 5.000 se dejaron ver en el cielo gallego. Además, lluvia.
 Hasta cuarenta litros por metro cuadrado en algunos puntos, durante una jornada fría con fuertes rachas de viento en el litoral. Las Rías Baixas fueron una de las zonas especialmente castigadas por el fenómeno meteorológico, donde además el frío se dejó notar, al pasarse en 24 horas de una máxima que rozó los 19 grados -en Vigo, por ejemplo- a los 11.

El aparato eléctrico castigó especialmente las provincias de Pontevedra y A Coruña. Fue en estas zonas donde más rayos cayeron, especialmente entre las seis y a las ocho de la mañana y entre las cuatro y las seis de la tarde. Si se tienen en cuenta también los rayos que cayeron en el mar, estos sumaron ayer algo más de 4.000.

La lluvia también se dejó notar. Esta fue especialmente intensa en la provincia de A Coruña. En Santa Comba, por ejemplo, cayeron hasta 40,8 litros por metro cuadrado durante las primeras horas del día. En otros puntos del centro de A Coruña y del oeste de la provincia de Pontevedra, como en la comarca de O Salnés, las lluvias superaron los veinticinco litros por metro cuadrado en algunos momentos, según Meteogalicia.

El viento fue otro protagonista de la jornada, con rachas de hasta 94,7 kilómetros por hora en el municipio coruñés de Cedeira, y con registros similares en el ayuntamiento de Carnota y en la pontevedresa isla de Sálvora. En toda la costa oeste de Galicia ha superado los sesenta kilómetros por hora en algún momento, lo que ha provocado, además, que la sensación de frío fuese mayor.

Brusco despertar

La tormenta provocó un reguero de incidentes, aunque de menor importancia. En Cea, Vilagarcía, un rayo entró por la instalación eléctrica de una casa y despertó bruscamente a sus habitantes, un matrimonio, su hija y la abuela, a las cinco y media de la madrugada. El rayo reventó la instalación eléctrica de la vivienda y también la telefónica, aunque afortunadamente la familia salió ilesa. Asimismo, en el lugar de Oubiña, en Cambados, se produjo un incendio en una casa abandonada, probablemente por la tormenta. En Bueu también se registró un incendio en una vivienda al incendiarse el deshumificador en medio también de la descarga eléctrica. Los bomberos no descartan que este incidente se debiera a la tormenta.

También en Mos, la caída de un rayo en las proximidades del pabellón polideportivo, que dejó a oscuras las instalaciones, provocó el pánico entre los usuarios, que fueron desalojados, aunque afortunadamente, no fue más que en un susto. Asimismo, un barco de pesca fue afectado por el impacto de un rayo mientras faenaba en aguas próximas a Camariñas, según el 112 Galicia, que informó de que los tripulantes se encuentran bien y que solo se registraron daños materiales en la estructura del pesquero.

La actividad de rayos que se registró ayer no sorprendió en exceso a los expertos, según admite la meteoróloga de Meteogalicia María Souto. El pasado 4 de noviembre, la tormenta dejó 3.359 rayos -13.225 si se incluyen también los que cayeron sobre el mar- y el 21 de septiembre, los detectores de rayos de Meteogalicia registraron 6.167 rayos en tierra, concentrados en las provincias de Ourense y Lugo. "El aire caliente pesa menos que el frío. Si entra aire frío en altura, como sucedió ayer, se desploma porque no es su lugar y se producen unas corrientes verticales muy bruscas que producen inestabilidad y ese aparato eléctrico", explica la meteoróloga.

Tomado de: www.farodevigo.es